sábado, 6 de julio de 2013

QUIEN LE TIENE MIEDO AL COCO, GUILLERMO FARIÑAS


Guillermo Fariñas, El Coco para sus amigos, y así le llamo porque aún cuando él, seguramente, ni sabe que existo, yo lo he seguido en sus huelgas de hambre, en sus entrevistas, y ahora tuve la suerte de verlo en la sala de mi casa, en el programa de Jaime Bayly, claro. Pues este sencillo hombre, de procedencia humilde, que transitó admirablemente hacia una disidencia abierta  y sin envolturas, víctima de ofensas, de incomprensiones, de incredulidades, tiene de nuestra parte toda la admiración y el apoyo.  Confieso que hace mucho no sentía emoción ante los temas políticos de la Isla, pero cómo no estremecerse ante ese cuerpo dañado, frágil, delgado, que sólo se mueve porque su dueño posee  una de las voluntades más impenetrables de la historia de Cuba.  Sus palabras al recibir el premio Sájarov, fueron muy claras, dijo      que en “Cuba cambian cosas para que no cambie nada”, porque Fariñas sabe que el gobierno castrista está tratando de jugar, de manipular, tanto a los gobiernos de Estados Unidos y de otros países, así como a la propia oposición interna, haciendo pequeñas reformas, porque el cambio de verdad no lo van a admitir nunca de buena voluntad , que es la implantación de un sistema democrático donde se empiece por la elección del gobierno como un acto de pura voluntad popular. Esperemos que la posición y el convencimiento de Fariñas pueda extenderse hacia los opositores y que no se dejen convencer por una silla en el capitolio, como se rumora por ahí que son las intenciones de los Castro y que mantenga firme sus palabras también pronunciadas ese mismo día en que recibió el premio: “Cuba será libre no porque el gobierno lo quiera, sino porque el pueblo así lo decide”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario